La primavera
(HAIKUS)
Nuevos brotes.
Galopando la vida
y un breve haiku.
No ha nevado
febrero estuvo ausente
duda la rosa.
Y la raíz
husmea bajo tierra
con su nariz...
Bellos narcisos
heraldos que me anuncian
la primavera.
Narciso libre,
La primavera,
lluvia, sol, trinos y vuelos;
se despereza.
Tan sin pudor
la primavera en celo
lujuria verde.
Ningún poema,
rosa de primavera,
mejor que tú.
A un lado de abril
vendaval, al otro un campo
que reverdece.
Sueño de abril
luz de estaño bruñido,
despertar añil.
Cielo de abril:
carpa de blanco y azul,
criba de luz.
Por fin la lluvia,
agua escapada al cielo,
ya regresó.
Lluvia de mayo
quizás se salve abril
hay esperanza.
Brotes nuevos
del árbol mutilado
en primavera.
Apiñaditos
los brotes del cerezo:
como hermanitos.
Cielo de mayo
aguacero y nublado
tormenta y rayos.
Relampaguea:
un rayo descabalga
de la tormenta.
Los rayos pasan
por la herida del cielo
y se detienen.
La primavera
eyaculando polen
por la pradera.
Olivos asombrados
agitaban sus ramas:
¡Nieve de primavera!
CANCIONES
Versión 1
Versión 2
He aquí 21 ejemplos de mi colección de 100 haikus. Estos relacionados con la primavera. A sus tres versos uno una hermosa imagen (entre propias y "apropiadas"). Hacer canción, poner música, a estos versos mínimos con esencias concentradas y ritmos tan íntimos se hace difícil; pero lo he intentado. Ofrezco dos versiones para poder elegir.
ResponderEliminarEnalgunos casos el mensaje se hace críptico para algunos. Para entenderlos quizá haga falta la experiencia común; no todos los poetas son comprendidos... Los sentimientos sin experimentación propia previa no se entienden bien. Ya lo dice la sabiduría popular cuando responde a la pregunta "Qué es enamorarse" y te responden: "Es cuando entiendes las canciones (de amor)"
He aquí, am odo de ejemplo, un poco de intrahistoria sobre estos poemas:
ResponderEliminarNuevos brotes.
Galopando la vida
y un breve haiku.
(Nace de la contemplación de un tronco cortado para cecar la fuente en un pueblo que conozco bien (Ayuela de Valdavia). A falta de "concho" se instaló un marco encuadrado por troncos de chopo. Esos miembros amputados, aparentemenet muertos tras el ataque de la motosierra, al contacto con el agua hicieron germinar algunas de sus yemas en nuevos brotes. Asombrado escribí este haiku).
No ha nevado
febrero estuvo ausente
duda la rosa.
En el campo, en mi jardín se atreven en marzo los rosales a desarrollar sus primeros brotes. Algunos, tempraneros, los alargan hasta formar ramas y, ,en su extremo,hacer nacer una rosa incipiente... Pero a veces las heladas tardías envuelven los tiernos capullos con su manto escarchado. La planta duda... ¿Me habré equivocado haciendo florecer a mis rosas demasiado pronto? ¡Son tan delicadas! ¡Quizá las he condenado a morir…!
Y la raíz
husmea bajo tierra
con su nariz...
Una raíz como nariz. Aparte de la semejanza fonética, su forma real y, también, su función... La raíz busca bajo tierra minerales, agua, nutrientes... "necesita respirar" a su modo su particular sustento. Incluso las ramificaciones subterráneas son semejantes a las ramificaciones olfativas en la pituitaria. He ahí donde se sustenta la imagen del poema.
Bellos narcisos
heraldos que me anuncian
la primavera.
Estos delicados narcios amarillos (aúnme gustan más los delicados de color crema, casi blancos, bellísimos en la noche) crecen sobre el alcorque del magnolio de mi patio. Entre febrero y marzo emergen de la tierra y proyectan en el aire su esbelta figura, su hermosa flor. Muy bien escogido el nombre de la flor (por su hermosa leyenda) éstos se muestran como heraldos que anuncian la estación de las flores.