sábado, 8 de octubre de 2016

Viajando en autobús.

En el autobús de Medina de Rioseco a Valladolid, al finalizar la ruta del Canal de Castilla escribí estos pareados. Los acabo de encontrar y los rescato ahora. Están fechados hace doce años, el diecisiete de mayo de 2004.


Murmullos, temblores, 
run-run de motores, 
revueltas, inercias, 
arritmias, cadencias... 

Invitan al sueño 
los campos trigueños.

La chica de al lado
se acuesta de lado.
Son negros, muy bellos, 
sus largos cabellos.

Por la ventanilla
desfila Castilla.

Y llegamos al fin, 
a Valladolid. 

2 comentarios:

  1. Me gusta esta poesía, con esas rimas olvidadas que dan musicalidad a la creación del artista.
    Murmullos, temblores
    campos de colores.
    Paseos de otoño,
    ocres y marrones.

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  2. Murmullos, temblores
    ¡Arriba, señores!
    súbanse a este viaje
    no olviden el equipaje
    parada en todos los temas:
    no olviden traer poemas.

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