Llorar

Cuando lloro, amor mío, no lo sabes,
el dique de mi orgullo aguanta mares;
aunque dentro, en mis ojos, los pesares
navegan tristes como negras naves.
Tengo a mis ojos cerrados con llave,
la llave doble de unos ojos pares:
ojos guerreros, verdes, militares;
que aguantan dentro lo que ya no cabe.
Lloro por dentro casi hasta manar
y espero algún día poder bañarte
con agua salida de mi propio mar.
Pero mientras tanto ¿cómo avisarte
de que formo mares de tanto llorarte?
¿Quién puede ver a los peces llorar?
CANCIÓN
"Los peces no tienen sed" es una expresión que he usado en más poemas. No sé de donde me salió (quizá la haya escuchado en alguna parte o leído en algún sitio); pero me gusta mucho. Es una de esas frases que sorprenden como "una paloma en una fiesta de peces". Llegará al blog un poema que se titula "Tú, por querer" que trata precisamente el tema de la contradicción, de la incomunicación y de la frustración.
ResponderEliminarPero en este poema, las lágrimas por toneladas no importan a quién las causa. ¿Quién puede ver a los peces llorar?