¡Cómo no iban a pensar los pueblos de la antigüedad que los rayos eran lanzas de la ira divina! Contemplar en una tormenta los rayos atravesando la barrera de nubes y lanzarse furiosos contra la tierra es una invitación poderosa a la teología de Júpiter.
¡Cómo no iban a pensar los pueblos de la antigüedad que los rayos eran lanzas de la ira divina! Contemplar en una tormenta los rayos atravesando la barrera de nubes y lanzarse furiosos contra la tierra es una invitación poderosa a la teología de Júpiter.
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