Un acróstico muy tonto

 

Acróstico de "jesús marcial grande gutiérrez"

Joyas y exponentes orgullosos, emisor en pos de instintos propicios, según la órbita en orden a los globos, último en los ojos de los niños. Sabia degradación de los blancos, malentendidos y bienentendidos, apego debajo de herederos innatos, repartos y pesimismos humanos. Cada vez más ensombrecidos, igual que el cuello a los hombros, actuaciones en defecto de esmeros tempranos, la belleza complace a los ojos. Gracias a la sequedad firman los bushel cardíacos, respuesta para el llanto de los niños, a esos niños que imaginamos, niño en orden a favores modernos. Dándote a malheridos aletazos, estelas mediante aniversarios bajos, guerrero en tiempo de ademanes lícitos, utopías y enfermos sinónimos. Tan rencorosamente enamorados, iras con objeto de acentos difuntos, éxitos y pescadores específicos, recubren racimos de pájaros. Retirado en la paz de estos desiertos, escolaridades y plásticos románicos, zaguanes y dormitorios súbitos. Y es tonto porque está hecho  con un generador automático de acrósticos. Como veis sale sin pies ni cabeza. Algún día haré alguno con cierto sentido.